Se trata de una opción que cada vez es más tenida en cuenta por quienes sienten pasión por las motos.
ealizan varios viajes por año en los que prevalecen la amistad y la camaradería.-
Son un grupo de hombres mayores de 30 años apasionados por las motos, a bordo de las cuales -desde 2006- se vienen trasladando varias veces al año a distintos puntos turísticos del país y del exterior, en los que comparten muy lindos momentos.
Entre el viernes y ayer estuvieron en nuestra ciudad a la que, habiendo partido de Buenos Aires, arribaron en la tarde del viernes luego de haber pasado por Tandil y Balcarce.
Antes de emprender el regreso a la Capital Federal, en el marco de una jornada fresca pero soleada, en la víspera disfrutaron del almuerzo en un restaurante ubicado en Cabo Corrientes, adonde este medio tuvo oportunidad de dialogar con Ariel Barrientos, el alma mater del grupo.
Tras comentar que “desde hace más de dos décadas soy agente de viajes” explicó que “a raíz de que siempre me gustaron las motos empecé a desarrollar una empresa (MX Tours) especializada en hacer turismo con ellas. Los que llegan como clientes terminan siendo amigos. Vamos por todo el mundo, con la salvedad de que, cuando nos trasladamos al exterior a países que no son fronterizos, las alquilamos.
Sin distinciones
Luego de expresar que “en esta ocasión participamos 18 personas que utilizamos desde una Ducati “diablo” que cuesta alrededor de 60 mil dólares, hasta una Beta 250 que es una de las más baratas del mercado” aclaró que “hay también de otras marcas tales como Harley Davidson, Honda, Triumph, y BMW. Si bien desarrollan diferentes velocidades, establecemos puntos en la ruta en los que, cada 100 kilómetros, nos reagrupamos, tomamos algo y reanudamos la marcha. Ante la eventualidad de que pueda surgir algún inconveniente, viajamos acompañados por una camioneta de apoyo en la que, como esta vez, cargamos una modelo 1981 que tuvo el mérito de llegar a Mar del Plata”.
Posteriormente afirmó: “este es el cuarto encuentro sobre ruedas que concretamos en lo que va del año en curso. Generalmente hacemos media docena por lo que, una vez que pase el invierno, tenemos previsto realizar otros dos. Son viajes en los que prevalece la camaradería que es lo que mejor representa el espíritu del motoquero. Mar del Plata siempre es una opción interesante ya que cuenta con muy buenos restaurantes y una excelente oferta hotelera, como es por caso, la del lugar que elegimos para alojarnos: el NH Gran Hotel Provincial”, afirmó.-